Hechizos y amarres de amor poderosos e indisolubles

“Hechizos y amarres de amor para regresar con tu ex”, “Hechizos y amarres de amor para hacer que alguien se enamore de ti”, “Amarre de las 7 Calaveras para fortificar una relación” ¿Cuántas personas escriben estas palabras en su buscador todos los días para encontrar información o contactar al vidente correcto?

El tema es amplio y es necesario aclararlo. Muchos, en primera instancia, buscan hechizos antiguos a distancia, hechizos de amor africanos o brasileños, con una clara intención de ‘hágalo usted mismo’, abarcando prácticamente todo el campo del esoterismo, para hacer que un ser amado vuelva a estar con usted, para unir a dos personas, para enamorarlas o encontrar un alma gemela, ya sea gay o del sexo opuesto.

En segundo lugar, al adentrarse en el laberinto del conocimiento mágico esotérico, toman conciencia de que la palabra ‘hechizos’ es un todo, incluidos los lazos del amor, un mundo dentro del cual encuentran su lugar todas las prácticas mágicas conocidas desde los albores de los tiempos. El hechizo de amor, dice el diccionario, es la práctica de canalizar energías hacia un propósito específico.

Pero los propósitos humanos son innumerables: enamorar a esa chica que tanto le gusta, ganar la lotería, que su vecino tenga mala suerte, desear profundamente el bien de un familiar o amigo, etc. Las personas buscan hechizos que sean efectivos, sencillos, rápidos, fáciles y potentes, atajos que ciertamente no van bien con una práctica mágica, como la de los hechizos de amor, que a pesar de ser reales y funcionar, pueden tener algunos peligros si no se llevan a cabo correctamente.

Los hechizos, incluso en los rituales vudú, están estrechamente relacionados con la magia ritual y los ritos mágicos. La estructura es similar para todas las religiones y todas las prácticas mágicas: practicar acciones, gestos, invocaciones, a veces usando amuletos y talismanes, fetiches o, más en general, símbolos, para dirigir energías que de otro modo serían fugaces y dispersas en una dirección precisa.

Casi siempre el usuario no busca palabras genéricas como hechizos de amor de magia roja, sino hechizos de amor, hechizos y magia de amor vudú, y esto es reconfortante. Es reconfortante pensar que el primer pensamiento de las personas es ir hacia el bien y no hacia el mal.

Por esto y por muchas otras razones, el hombre siempre se ha volcado hacia algo superior, buscando resultados inmediatos, instantáneos e infalibles, para ajustar y facilitar su vida. Los hechizos de amor existen, funcionan y son efectivos. Pueden ser duraderos en el tiempo o hasta indisolubles, pero el usuario debe saber que cualquier hechizo de amor no puede tener un significado de “hágalo usted mismo”.

Esta creencia se ha extendido, especialmente entre los más jóvenes, de poder ir al supermercado, conseguir algunos ingredientes, recitar algunas palabras encontradas en un sitio, e intentar practicar hechizos de amor genéricos. ¿Y cuándo se debe hacer estos hechizos de amor? ¿Con luna menguante, luna llena o luna nueva? La única suerte de estas personas es que la mayoría de las veces no pasa nada. No tienen la preparación necesaria para reunir las energías etéreas, por lo que no mueven nada.

Pero a veces el problema es el contrario. Estos hechizos de amor de bricolaje, para ser recitados y hechos en casa, tal vez con fotos, con limón, con sangre menstrual, por alguna razón fortuita, ante todo el alto grado de sensibilidad de ciertas personas que actúan como catalizadores, lograr concentrar energías. Y muchos, si no todos, tienen ahora una vela blanca o una roja, o rosa, con la que construir una muñeca de cera, a la que recurrir cuando sea necesario. Las experiencias se desperdician, pero luego surge el eterno problema de estas energías y cómo deben ser transmitidas.

Para que los hechizos de amor sean realmente efectivos, las energías deben ser manejadas por una mano experta y dirigidas hacia una dirección en concreto.  No hay improvisaciones ni tampoco hay rituales gratuitos. Quien deja abierto un amarre o ritual, con energías agrupadas que no tienen una dirección precisa, comete un gravísimo error y acarrea consecuencias dañinas para todos. Entonces la búsqueda en Internet ya no será “hechizos de amor fáciles”, “hechizos de amor poderosos“, “hechizos de amor para atraer a alguien”, sino “cómo liberarse de un maleficio”, “cómo limpiar su energía”, “cómo eliminar la negatividad de su vida”.

La religión vudú se distingue por la posibilidad de realizar rituales mágicos, ritos de amor, para solucionar problemas del corazón y traer de vuelta a un ser querido. La magia del amor vudú es la más poderosa que hay en el campo esotérico, y de esta manera quienes busquen esa ayuda tan deseada tendrán la certeza de que son realmente efectivos, poderosos, duraderos e indisolubles, precisamente porque concentrar energías es su objetivo más importante.